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Estos vinos suelen ser los primeros en venir a la mente de los aficionados cuando piensan en las mejores botellas del mundo. Cuando se trata de invertir en grandes vinos, los blue-chips están en la cúspide, por encima de los demás. Esto es lo que hace que los blue-chip sean una inversión tan atractiva para quienes buscan obtener beneficios de los vinos como activo de inversión. Más allá del prestigio del que gozan y pueden presumir ampliamente, estos vinos tienen mucho que ofrecer en términos de valor de mercado potencial, especialmente a largo plazo.

Es este artículo, le explicamos con detalle qué es un vino blue-chip, por qué merece la pena invertir en ellos y cómo puede crear una cartera de inversión a partir de estas etiquetas emblemáticas.

Créditos: Insolity/Primeras Marcas.

¿Qué define a un blue-chip?

En pocas palabras, un blue-chip es aquel activo que se considera una inversión estable. La palabra "blue-chip" procede del mundo más amplio de las inversiones financieras, donde se refiere a valores fiables de empresas reputadas que tienen un historial de crecimiento en el mercado. En los últimos años, los inversores han empezado a aplicar este término también a los grandes vinos, tras ver su potencial como activo financiero. En cuanto a qué vinos se consideran blue-chip, no existe una norma estándar exacta para definirlos. No encontrará una lista concreta de etiquetas consensuada por todos los entusiastas, inversores y especialistas.

Sin embargo, hay ciertas etiquetas que la mayoría de los expertos consideran blue-chip, y todas ellas tienen algunas características en común. Un vino blue-chip está muy bien valorado y los expertos lo consideran una inversión fiable a largo plazo. Por lo general, estos vinos proceden de productores bien establecidos que gozan de una reputación estelar en la elaboración de vinos de alta calidad año tras año. Además, tienen un buen desempeño en el mercado y se revalorizan a medida que envejecen. No todos los inversores beben el vino que compran, por lo que llamar a un vino blue-chip es una forma útil de identificar los vinos finos que tienen más probabilidades de ofrecer un rendimiento favorable de la inversión en el futuro.

Fuente: Datos internos Insolity y del mercado Europeo.

¿Qué diferencia a un vino blue-chip de otros tipos de vino?

Le damos algunos factores esenciales que puede buscar en una etiqueta de vino fino:

1. Reputación

El productor lleva elaborando vino al menos una década, a menudo muchas décadas, y en este tiempo ha impresionado a algunos de los críticos de vino más reputados. El nombre por sí solo denota calidad, y es un nombre que la mayoría de los aficionados al vino conocen bien. Petrus o Le Pin son dos de los ejemplos más paradigmáticos.

2. Valor a lo largo del tiempo

Se trata de una medida complicada porque el valor del vino a lo largo del tiempo no siempre es predecible o constante. Existe un "efecto escalera" en el que el vino suele estancarse en el precio durante un tiempo antes de subir de valor y estancarse de nuevo. Con el tiempo, sin embargo, hay un patrón claro. Los mejores vinos tienden a ser más valiosos en los años posteriores a su lanzamiento que en el primer año. El aumento exacto del valor varía en función del productor, la etiqueta, la añada y el periodo ideal de consumo (los vinos suelen aumentar de precio hasta el momento en que alcanzan su punto álgido de madurez).

3. Potencial de envejecimiento

Para que un vino se revalorice con el tiempo, debe poder envejecer durante una década o más sin deteriorarse. La mayoría de los mejores vinos pueden envejecer entre 15 y 30 años, dependiendo de la variedad y la añada. En general, cuanto más tiempo pueda esperar para vender su vino antes de que pase su periodo ideal de consumo, más posibilidades tendrá de obtener beneficios.

4. Rareza y demanda

La mayoría de los vinos de blue-chips son raros y de escasa producción. Esta exclusividad aumenta la demanda del vino en el mercado y, por tanto, su valor. A medida que el vino se bebe o las botellas se pierden con el tiempo, la rareza aumenta, y a menudo también lo hace el precio.

5. Añada

La ventaja de los vinos blue-chip es que tienden a conservar su valor de un año a otro. Aunque algunas añadas son más valiosas que otras, no suele haber grandes diferencias de precio de una añada a otra, salvo excepciones. Esto es especialmente cierto si el productor es conocido por elaborar añadas de calidad constante.

6. Calidad

Aunque no tenga en mente beberse el vino, la calidad sigue siendo un indicador importante de que una etiqueta es de primera categoría. Para que una marca adquiera una buena reputación y valor en el mercado, el vino en sí debe ser especial. La calidad también protege el valor del vino en el futuro. El buen vino inevitablemente alcanzará el nivel más alto, ya que siempre habrá aficionados dispuestos a pagar mucho dinero por los mejores vinos del mundo.

Ahora que hemos desglosado los puntos para entender mejor qué es un vino blue-chip, veamos cómo estos vinos pueden enriquecer su cartera de inversiones.

¿Qué fortalezas aportan los vinos blue-chips a su cartera de inversiones?

a) Prestigio: los blue-chips son los vinos más lujosos del mundo, alcanzando altos precios tal y como también sucede con las marcas de alta costura. Incluso aunque cambien las tendencias, existen marcas que siguen concentrando la atención durante décadas.

b) Oferta limitada: Burdeos y Borgoña son de las zonas que más interés despiertan en términos de inversión. En Burdeos, la producción de estas etiquetas es mayor que en Borgoña, pero aún así suele ser inferior a 180.000 botellas; una oferta limitada que, además, se vende mayoritariamente En Primeurs y, por lo tanto, beneficia a quienes compran a la avanzada.

c) Alta demanda: por más que disminuyan las existencias en el mercado, la demanda de los blue-chips sigue creciendo. Además, el paso del tiempo tiende a revalorizarlas y cada botella que se descorcha sube el valor del resto.

d) Potencial de reinversión: como bien de inversión, a priori es más fácil obtener ganancias mediante vinos blue-chips dentro de los cinco a siete años después de su lanzamiento, pudiendo reinvertir los beneficios en más futuros de vino.

¿Cómo construir su portfolio?

Identifique las mejores añadas

La mayoría de las añadas de estos vinos serán dignas de inversión, sin embargo, algunas serán más valiosas que otras. Por lo general, las añadas más recientes son las más atractivas para los inversores, ya que a menudo pueden adquirirse al precio más bajo posible y es probable que aumenten de valor a medida que envejecen: de ahí el interés que suscita comprar en Primeurs. Las añadas más antiguas también pueden merecer la pena, sobre todo si están muy bien valoradas (aunque estos vinos suelen costar más por adelantado, por lo que el margen de beneficio puede ser menor). Una cosa que hay que tener en cuenta es evitar comprar vinos que estén en su punto álgido de madurez o que ya hayan pasado su periodo de consumo. Estos vinos tienen menos potencial de inversión a largo plazo, ya que están listos para beber (o lo estarán pronto).

Compruebe la procedencia del vino

Los inversores deben ser conscientes de la procedencia, incluso más que otros coleccionistas de vino. La procedencia es un registro probado de la autenticidad y la propiedad del vino, desde el momento en que sale de la bodega hasta la actualidad. Al igual que ocurre con las obras de arte, parte del valor del vino depende de su capacidad para demostrar su procedencia, de modo que los futuros compradores sepan que es auténtico y está intacto. Puede asegurarse de la procedencia del vino comprando futuros de vino, comprando vino que procede directamente de la bodega o comprando a un minorista o tienda de confianza que garantice la trazabilidad de las botellas. Cuanto mejor sea la procedencia del vino, mayor será su valor futuro.

Créditos: Joël Ventura

Invierta en futuros de vino

No todo el vino está disponible para adquirir en avanzada o a futuro, pero los que lo están tienen el mayor potencial de inversión. Los futuros de vinos blue-chips suelen ser ofrecidos por casas de confianza antes de que el vino salga al mercado, a menudo incluso antes de que se haya embotellado. Los precios se basan en la calidad prevista de la cosecha. Más tarde, cuando el vino sale al mercado, puede hacer que le envíen sus compras, denominadas asignaciones, a su bodega personal o, con Insolity, tiene la posibilidad de depositarlos en su espacio privado de guarda para particulares: la Cripta.

El recurso más importante que tiene como inversor es contar con un servicio de provisión que le asesore y le ofrezca todas las garantías. Las tiendas especialistas como Insolity le ofrecen futuros de vino y avanzadas de algunas de las principales marcas del mundo. También contar con un asesoramiento experto de nuestros consultores-sommeliers, que pueden determinar qué añadas tienen más potencial. Si dispone de un espacio de guarda como la Cripta, incluso puede almacenar sus vinos para proteger sus inversiones y garantizar la procedencia del vino cuando llegue el momento de venderlo si finalmente es su deseo.

Espacio de Guarda Privado - Cripta. Insolity/PM

Cómo optimizar al máximo su inversión en vino

Si desea invertir en vinos blue-chips, puede concertar una reunión con nuestros expertos. Nosotros seleccionamos los vinos, entre todas las mejores marcas, basándonos en nuestra experiencia de más de 35 años en la distribución de grandes vinos así como en datos de mercados y cifras propias de negocio. Como miembro Insolity, disfruta de acceso preferente a ciertas asignaciones codiciadas que serían difíciles de encontrar para otros particulares, que podrá posteriormente guardar y proteger en la Cripta. Sea cual sea su objetivo, las inversiones en grandes vinos y —en concreto— en vinos blue-chip son ampliamente atractivas y mucho más que refinadas botellas para ocasiones especiales: son activos disfrutables que le servirán para diversificar su carteta de inversiones.